La Asociación de Industria
Navarra (AIN) y la
Fundación Adecco han organizado la jornada “La Responsabilidad Social
Empresarial como estrategia de competitividad”. El
mensaje y compromiso que ambas entidades han trasladado a través de esta
jornada,ha contado con el apoyo del Gobierno de Navarra a través de la Consejería de Políticas
Sociales y ha sido reforzado por buenas prácticas implantadas por las empresas
navarras M. Torres y Faurecia.
Esta jornada ha contado con la presencia de Iñigo
Allí Martínez, Consejero de Políticas Sociales del Gobierno de Navarra,
quien ha trasladado el compromiso que existe en el gobierno navarro con el
desarrollo de estrategias dirigidas a fomentar la integración de aquellas
personas que tienen mayores dificultades para acceder al empleo.
Asimismo, ha
insistido en la importancia del capital humano, pues el “alma” de las empresas
reside en las personas que la integran y son ellas las que deben impulsar su
Responsabilidad Corporativa. El Consejero ha hecho referencia a un proyecto que
próximamente se presentará en el parlamento foral con el que se pretende
incentivar, impulsar y reconocer a las personas físicas y jurídicas
comprometidas socialmente.
La presencia y
participación de multitud de empresas y el interés mostrado, confirman la apuesta
progresiva por modelos responsables en la gestión empresarial. “Nuestra experiencia nos dice que las
empresas que integran una estrategia de Responsabilidad Corporativa mejoran su
competitividad empresarial, gracias a una mayor apertura y cercanía a la
sociedad y a una mayor eficiencia en sus procesos”, comenta Francisco
Mesonero, director general de la Fundación Adecco.
En un contexto
socioeconómico complejo, el empleo ha sido uno de los focos más importantes de la jornada. El
cumplimiento de la LISMI - ley de integración social del Minusválido- y la
integración laboral de aquellas personas que mayores dificultades tienen para
encontrar empleo, han centrado gran parte del discurso de los diferentes
ponentes.
Íñigo Allí Martínez ha subrayado que “la LISMI tiene más de 30 años y
por desgracia aún hay muchas empresas que no la cumplen. Sin embargo,
la integración laboral de las personas con discapacidad,no debe responder a una
obligación legal, sino que tiene que partir de un compromiso de las empresas y
un convencimiento de que la diversidad corporativa es un valor diferencial para
las empresas. Saber gestionar esta diversidad y transformarla en talento y capital
humano es el gran reto”.
Por su parte Pablo
Urdiroz, director de desarrollo de personas en M.Torres y Cesar Lafraya,
director de Recursos Humanos de Faurecia, han materializado este compromiso
trasladando el proyecto de integración laboral de personas con discapacidad que
están desarrollando con la Fundación Adecco.
Por último, Juan
Biurrún, director de desarrollo de negocio de AIN, ha resaltado “nuestro
interés en acercar y sensibilizar a las empresas asociadas de AIN sobre los
temas de responsabilidad social” y la la idea de que “la empresa cumple, además
de una función económica, una función social generando empleo y riqueza para la sociedad. Cada vez
más, a los ciudadanos nos gusta trabajar en empresas y organizaciones con “cara
humana”, que sean sensibles, atiendan y den respuesta a las necesidades de sus
empleados y de otros ciudadanos de su entorno”.