CaixaBank ha invertido en dos proyectos energéticos en Colombia con el objetivo de contribuir a la reducción de gases con efecto invernadero y compensar el impacto ambiental de las emisiones de CO2 generadas por los servicios centrales de la entidad en 2013.
Concretamente, CaixaBank ha compensado la emisión de 658 toneladas de CO2 producidas por la actividad en la sede situada en la avenida Diagonal. Esta cifra corresponde a las emisiones realizadas a consecuencia del trabajo en el edificio: por ejemplo, por el consumo de energía y agua o la producción de residuos, entre otros. El cálculo también incluye los viajes profesionales de los empleados.
Los proyectos que se financian en Colombia permitirán generar, a partir de fuentes que no generan emisiones, energía suficiente para la compensación del carbono generado por la actividad de la entidad. Uno de los proyectos está basado en la energía eólica y se sitúa en el departamento de Guajira, en la costa atlántica del país. Tendrá capacidad para producir 19,5 megawatios de electricidad al año. Ubicado en un área con escasos recursos económicos, se estima que contribuirá a inyectar 21 millones de dólares al sistema eléctrico colombiano.
El segundo proyecto, localizado en el departamento de Cundinamarca, tiene como objetivo reducir las emisiones de CO2 mediante la sustitución de combustibles líquidos derivados de petróleo por gas natural en ocho empresas colombianas. El gas natural que pasarán a utilizar está financiado por créditos de carbono en el marco del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDN) del Protocolo de Kyoto.
CaixaBank es la entidad financiera española con mayor transparencia en la gestión del cambio climático según el Carbon Disclosure Project (CDP), el único sistema global de comunicación de información ambiental corporativa de todo el mundo.
CaixaBank obtuvo en la última edición del CPD una puntuación de 97B, la mayor valoración de todo el sector financiero en España, que indica el alto nivel de su gestión medioambiental y la publicación de información completa y relevante sobre las cuestiones relacionadas con el cambio climático que le afectan. Esta puntuación le ha permitido entrar en el índice CDLI (Carbon Disclosure Leadership Index), que reconoce la transparencia y la calidad de la información en cambio climático.
Los éxitos en gestión medioambiental de CaixaBank han sido también distinguidos con el reconocimiento del Dow Jones Sustainability Index (DJSI). Con una valoración global de 82 puntos, la entidad ha mejorado este año su puntuación en el principal indicador mundial de actuación de las empresas en términos de sostenibilidad. De esta forma, CaixaBank refuerza su posición entre los bancos más destacados del mundo en materia de responsabilidad corporativa.