¿Cuándo empieza la Responsabilidad Corporativa en el grupo de empresas de la ONCE y su Fundación?
Nace desde el primer paso que se da al constituir un grupo de empresas, e incluso anteriormente, con la creación de Fundación ONCE en 1988. La Responsabilidad Corporativa es un instrumento de solidaridad por parte de ONCE. Formalizada hacia el resto de la discapacidad y que se materializa desde el punto de vista empresarial con la creación de las diferentes compañías e iniciativas empresariales, en este caso el Grupo de empresas de la ONCE y su Fundación. La actividad socialmente responsable, desde el punto de vista empresarial, forma parte de nuestra cultura corporativa, de nuestra estrategia y de nuestro día a día; por lo tanto está integrada en nuestra agenda.
¿Hacia qué colectivos está dirigida la RSC del grupo de empresas de ONCE y su Fundación?
Por la idiosincrasia, el origen y los fines de ONCE y su Fundación, estamos orientados a tres áreas de actuación fundamentales: el empleo, la accesibilidad y la formación; entendidas como herramientas de empleabilidad y generadoras de empleo. Nuestra actividad se focaliza en las personas con discapacidad. Este es el principal grupo social al que nos dirigimos, pero colaboramos con todos los colectivos e iniciativas empresariales, multisectoriales y de entornos colaborativos, como puede ser la Fundación SERES. Asimismo, participamos en proyectos donde, además del de la discapacidad, se atiende a otros colectivos en riesgo de exclusión y a los que nosotros, como parte de la sociedad, no podemos ser ajenos. Debemos estar ahí y, de hecho, así lo hacemos.
¿Cuáles son las principales características de esta Responsabilidad Social Corporativa?
Nuestra principal actividad, y más en estos tiempos, ha sido el fomento del empleo. Tratamos de ser un referente y una referencia -y creo que lo hemos conseguido- en cuanto a generación y creación de empleo para personas con discapacidad. El grupo de empresas de la ONCE y su Fundación es un ejemplo de cómo la “R” de responsabilidad combina perfectamente con la “R” de rentabilidad social, que se hace compatible, además, con la rentabilidad económica.
Además, somos un ejemplo en España de cómo acercarse a la discapacidad en términos de capacidad y de realidad empresarial, pero más aún, de una realidad empresarial rentable, donde todas las partes implicadas en ese proceso ganan desde el punto de vista de la participación y la integración real. Gana la persona con discapacidad, su familia, y su entorno. Y lo hacen desde el punto de vista de la normalización y la visibilidad que aporta la inclusión laboral; que es, en definitiva, la que determina una integración social efectiva.
Y ganan también las administraciones públicas porque no es lo mismo que 100.000 personas estén recibiendo una prestación social o un subsidio, a que este mismo número de personas esté trabajando, cotizando, dadas de alta en la Seguridad Social, consumiendo y formando parte de cualquier cadena de valor o actividad. En definitiva, creo que la integración empieza por ahí, por el empleo. Es la mejor herramienta desde punto de vista de la inserción de la persona con discapacidad y de su entorno.
¿Qué diferencias o semejanzas más relevantes hay entre las iniciativas realizadas entre Fundación y la actividad empresarial?
La actividad de la Fundación gira en torno a los tres ejes que comentamos: propiciar empleo y la mejora de las condiciones laborales de las personas con discapacidad, avanzar en accesibilidad y ser una herramienta y una plataforma de formación para el colectivo. Entendemos esa formación como la mejor herramienta de cara a esa empleabilidad que a veces no es tan fácil, por las barreras existentes o por los prejuicios que existen en el ámbito empresarial. Esto se mitiga mediante la labor de sensibilización que llevamos a cabo desde hace muchos años en Fundación ONCE.
Por otra parte, en nuestra actividad desde el punto de vista empresarial no nos diferenciamos del resto de empresas en la actual situación del mercado con este contexto económico. En eso, como en tantas otras cosas, somos iguales al resto de compañías; pero somos diferentes en nuestra apuesta por la generación de empleo para personas con discapacidad, como ya he comentado. Muchas de nuestras empresas son Centros Especiales de Empleo (CEE) y más del 70% de sus platillas y, en algunos casos, más del 90% están compuestas por personas con discapacidad.
Además de ser CEE, algunos de ellos son líderes de distintos sectores en España. Tenemos empresas como Flisa, que es líder del sector de las lavanderías industriales, y casos de éxito, como lo creación de puestos de trabajo que estamos impulsando en el sector de la automoción y la industria auxiliar del automóvil, con un proyecto emblemático, que nació a través de una colaboración con Ford y en el que somos socios estratégicos. Con esto conseguimos que la discapacidad no se vea en términos de problema, sino de oportunidad y hacer que se entienda, en definitiva, como capacidad de las personas.
En un contexto y en una sociedad cansada de malas noticias en torno al empleo, hemos cerrado 2013 con un récord absoluto de generación de empleo para personas con discapacidad. Podemos decir, más que satisfechos, que ha habido más de 9.000 puestos de trabajo para personas con discapacidad en 2013. Es un logro que hay que destacar, estamos orgullosos de ello y hay que contarlo aquí y también fuera de España.
¿Cuál es el principal proyecto de RSC del grupo de empresas de ONCE y su Fundación para 2014?
Somos quienes somos y podemos hacer las cosas que hacemos gracias a otros, gracias a las alianzas. Los proyectos con un efecto multiplicador y que más y mejor impacto tienen en la sociedad en general, y en la empresa en particular, se hacen con terceros. Esa es nuestra filosofía y de ahí nuestra gran actividad a la hora de firmar convenios y alianzas con otras entidades, del tipo que sean. De ahí el nombre de nuestro informe de Responsabilidad Corporativa, que es un documento de valor compartido, ya que estamos convencidos de que el valor que creamos es mayor cuando es compartido con otras empresas, organizaciones y con la sociedad en general. Ese es nuestro gran reto: queremos dar forma a nuestro primer informe de valor compartido del grupo de empresas de ONCE y su Fundación, de CEOSA y de FUNDOSA. Otro reto a destacar es nuestra apuesta por la transparencia y la eficiencia en la gestión y en los proyectos con un componente y gestión éticos.
¿De qué modo está implicada la dirección del Grupo de empresas de la ONCE y su Fundación en la Responsabilidad Corporativa?
Tenemos la grandísima suerte de que desde el primer ejecutivo del grupo de empresas al primer ejecutivo de la Fundación ONCE, pasando por todos los miembros del Comité de Dirección, están involucrados en toda nuestra actividad en materia de Responsabilidad Corporativa, porque gran parte de nuestra actividad tiene que ver con esta cuestión. Nuestro día a día tiene que ver con proyectos de personas que son el motor de nuestra organización y esos proyectos están presentes en nuestros ámbitos de decisión y en nuestros comités de Dirección.
Todo lo que tiene que ver con las políticas de discapacidad, de integración, directa o indirecta, de las personas con discapacidad o con el desarrollo de productos y servicios para el colectivo forma parte de nuestra actividad. España es una referencia y un referente en políticas de Responsabilidad Social Empresarial y Discapacidad (RSED) en particular, pero también de Responsabilidad Corporativa en general. Creo que la discapacidad cada vez tiene más presencia en el ámbito de la Responsabilidad Corporativa. Además, la discapacidad, por primera vez desde finales de 2013, está presente en la agenda de los estándares internacionales como GRI y esto es crucial en términos de RSED y también para la Responsabilidad Corporativa. Crucial es también que esté liderado desde España y por dos organizaciones como la Fundación ONCE y el CERMI.
¿Es importante que la sociedad conozca la RSE?
Lo que no se comunica no existe; las cosas hay que contarlas y compartirlas. Muchas veces esto sirve para que surta un efecto multiplicador e inspirador y colaborativo. En definitiva, soy más amigo de contar las cosas cuando han ocurrido y, si han salido bien, mucho mejor. Creo que la Responsabilidad Corporativa ha sido una cuestión pendiente en el ámbito de la comunicación empresarial y hay que colocarla en igualdad de condiciones respecto a otras acciones que cuentan las empresas. La comunicación, soy un convencido, es un elemento primordial a la hora de difundir estas políticas y de trasladar a la sociedad la dimensión que ya tiene en el día a día de las compañías.
¿Qué aporta el grupo de empresas de la ONCE y su Fundación a SERES y viceversa?
Un efecto multiplicador que tiene que ver con la generación de oportunidades, de proyectos y también con sensibilizar y comunicar para que la Responsabilidad Corporativa llegue al mundo de la empresa en particular y a la sociedad en general. Ese es el objetivo de lo que da nombre a SERES (sociedad y empresa). Hemos participado en proyectos conjuntos y comunes. Entre ellos, destacaría uno relacionado con esa creación de valor compartido que es la Fundación Bequal, de la que soy secretario y de la que SERES, a través de su directora, Ana Sainz, es patrona.
Con el sello ‘Bequal’ hemos querido crear un estándar para el reconocimiento de la excelencia dentro de la Responsabilidad Corporativa en relación con la discapacidad. Así, esta distinción pone en valor todos los esfuerzos que realiza una empresa en materia de responsabilidad corporativa en general y de discapacidad en particular. Bequal utiliza la terminología inglesa (“be equal”), ser iguales, ser inclusivos, ser diversos.
Ese es el objetivo de esta Fundación, donde están las principales organizaciones y entidades del ámbito de la Responsabilidad Corporativa de este país y en la que tiene representación también la administración pública, y que quiere ser un referente a nivel nacional. En este sentido, ya se han producido las primeras certificaciones. ‘Bequal’ valora, desde la estrategia y liderazgo, la gestión de los recursos humanos, la accesibilidad, la compra responsable, la acción social o la cadena de valor hasta la comunicación.