La acción social en Citi, ¿cuándo y por qué comienza?
La actividad de acción social de
Citi
en España se inició en el año 2000, enmarcada dentro de la estrategia
global de la corporación de aportar valor en los países en los que Citi
está presente y fomentar la participación de los propios empleados.
¿Cuáles son los objetivos la Responsabilidad Social Empresarial (RSE) de tu empresa?
El objetivo de Citi es mejorar las comunidades en las que los empleados
vivimos y trabajamos. Nuestro compromiso con la acción social se basa
en dos pilares fundamentales: por un lado, la educación financiera y el
fomento del espíritu emprendedor en jóvenes y niños y, por otro, el
voluntariado de nuestros empleados.
Gracias al importante papel de los voluntarios de Citi en nuestro país
(un 25% de la plantilla) y al estrecho trabajo con ONG muy implicadas en
entornos marginales y en el ámbito escolar y de formación profesional,
como
Junior Achievement,
Fundación Èxit,
Fundación Tomillo o
Fundación Once,
intentamos que, desde una edad temprana, se adquieran conocimientos y
habilidades que ayuden a colectivos en riesgo a participar plenamente en
la sociedad y a fomentar un espíritu emprendedor en ellos.
Realizamos distintos programas educativos financiados por la
Fundación Citi
y actividades de voluntariado social, principalmente, en horario
laboral. En el curso 2010--2011, más de 600 empleados han participado en
actividades de voluntariado, beneficiando a más de 4.300 personas.
¿Nos describes algunas de las actividades que realizáis?
Dentro de los programas con Junior Achievement destacaría el programa
de “Las ventajas de Permanecer en el Colegio” con el que tratamos de
inculcar a chicos con problemas en los estudios el valor de esforzarse y
seguir estudiando, en el colegio o una profesión, como forma de tener
más posibilidades profesionales y una mejor vida laboral y personal. Con
Fundación Tomillo utilizamos una obra de teatro interactiva y un cómic
para inculcar a niños en la preadolescencia valores de ahorro, gasto y
consumo responsable, no dejarse llevar por un apetito desmesurado por
las marcas, etc. Con Fundación Exit y la ONCE hemos desarrollado módulos
de formación financiera básica, que en el caso de esta entidad es
online y adaptada a lenguaje fácil.
Por otro lado, realizamos cerca de dos jornadas de voluntariado social
al mes. Tratamos de abarcar un amplio abanico de actividades y
colectivos para que los grupos de voluntarios elijan las actividades que
mejor les encajen: medioambiente, niños, ancianos, personas con
discapacidad, enfermos, pintar… Y lo hacemos “llave en mano”, es decir,
se lo damos todo hecho. Para nosotros es una forma estupenda de fomentar
el trabajo en equipo y el sentido de pertenencia. Los propios jefes de
departamento o área ven los beneficios tangibles de realizar estas
actividades por el impacto que tienen en la mejora del ambiente de
trabajo, al mismo tiempo que se ayuda a alguien necesitado. ¡Qué más se
puede pedir!
¿Qué grupos de personas se benefician de la acción social de Citi?
Damos prioridad a actividades en zonas más desfavorecidas de cada
localidad en donde actuamos y en grupos en riesgo de exclusión. Queremos
colaborar en la tarea de crear una sociedad mejor y más justa,
fomentando una mejor educación de las próximas generaciones.
¿Está implicada la alta dirección de Citi en la acción social?
Completamente. No llegaríamos a un 25% de participación de los
empleados en actividades de voluntariado si no tuviéramos el apoyo
decidido, no sólo de la matriz o de la dirección del grupo en España,
sino de los mandos intermedios. La acción social y el voluntariado están
en el ADN de Citi. Todos nuestros empleados en el mundo tienen derecho a
cogerse un día al año para realizar una actividad de voluntariado en
horario laboral. No es un deber, es un derecho que todos tenemos por ser
empleados del banco. El voluntariado en Citi no se discute porque es
percibido por todos los empleados como una estrategia a largo plazo,
como una parte importante de la cultura corporativa.
Por otro lado, los directores de negocios o funciones de soporte
también participan a lo largo del año en actividades de voluntariado.
Por ejemplo, el año pasado, todo el Comité Ejecutivo de Citibank España,
compuesto por 14 personas, fue a pintar una residencia de mujeres con
discapacidad psíquica de la
Fundación Magdalena en Madrid. Hay que liderar con el ejemplo, y también en RSE.
Para 2011, ¿en qué proyecto de RSE tenéis puesta toda la atención?
Me costaría elegir un solo proyecto. Queremos seguir desarrollando
nuestras líneas de actuación, intentando hacerlo cada día mejor y
aportando cada vez más valor a los beneficiarios.
¿Es necesario que la gente conozca la acción social de una empresa?
Sin duda. Interna y externamente. No hay que tener pudor en comunicar
las cosas que son buenas y que se hacen bien. Por un lado, porque es una
forma de reconocer la labor y participación de todas las personas que
participan en estas actividades. Por otro, porque dar ejemplo sirve de
motor para que otras empresas o personas se animen a andar este camino.
Camino no exento de dificultades, pero al que, sin duda, merece la pena
dedicarle tiempo, esfuerzo y recursos.
¿Qué beneficio os reporta ser miembro de Fundación SERES y qué aportáis vosotros al proyecto de la fundación?
Fundación SERES nos facilita el intercambio de conocimientos con otros
socios, entidades y agentes sociales a través de una continua
interacción y el trabajo en red. Nosotros podemos aportar, de una forma
transparente y participativa, lo que sabemos hacer: nuestra experiencia
local y global en educación y voluntariado