2015: GENERANDO VALOR PARA LA SOCIEDAD
Termina 2015 y para nosotros es un auténtico motivo de celebración ver cómo nuestro sueño, nuestro reto, una sociedad mejor, con empresas sólidas, comprometidas, sostenibles gracias al valor compartido sociedad-empresa va creciendo. ¿Era posible? ¿Es posible? Sólo puedo decir que sí y que el despegue de los proyectos con valor social y su calado en la sociedad y el tejido empresarial español en estos años ha sido notable.
Hace 20 años, ¿podíais imaginar que lo responsable podía ser rentable?, ¿que quizás el 80% de las empresas basarían su valor por los intangibles? O que ¿la excelencia era más bien una cuestión de responsabilidad? Acaso encuentros como Davos, organizaciones como Naciones Unidas o facultades como Harvard ¿podrían contar con espacios específicos para debatir acerca de la importancia de la colaboración entre sociedad y empresa? No es filantropía, no es caridad, sino es facilitar un efecto multiplicador de impacto entre el compromiso social y la acción empresarial.
En SERES apostamos firmemente por establecer retos –no sólo implementar programas-, consolidar la figura del líder, como pieza clave en el cambio cultural, para contagiar su visión responsable al resto de la organización y lograr empresas más exitosas, de mayor excelencia.
No hay duda de que las estrategias que establecen relación entre la empresa y la sociedad están experimentando una evolución progresiva. Cada vez, resulta más habitual ver el paso hacia la visión global de las corporaciones, la redefinición de colaboración de las industrias en oportunidades de desarrollo global y el nacimiento de alianzas estratégicas con otras organizaciones. En definitiva, las empresas buscan crear actuaciones sociales perdurables en el tiempo, eficientes, que multipliquen el impacto y que conviertan el compromiso social empresarial en oportunidades. Nosotros somos unos convencidos de que esto genera valor compartido. Sociedad y empresa no pueden andar separados. La empresa se ha dado cuenta de esta realidad y sin lugar a dudas la RSE es un factor de éxito de las compañías y una garantía para mantenerse en el mercado en un futuro. Otro de los aspectos más relevantes de las actuaciones sociales en las empresas es la innovación. SERES cree en la innovación social como elemento indispensable, para afrontar los retos, que se plantean a los actuales gestores empresariales. Estrategias sencillas para dar solución a problemas reales, al tiempo que se convierten en motores de cambio. Es indudable que la innovación social es una herramienta natural, para unir rentabilidad social y financiera. Hablamos ya de un 80% del valor de las empresas que no se refleja en los tangibles sino en los intangibles.
El compromiso de la alta dirección, el rigor y la capacidad de medir el impacto de la RSE, las alianzas con otras organizaciones y la búsqueda de modelos a gran escala son los denominadores comunes de las empresas más relevantes. Es crucial el establecimiento de retos -no sólo implementar programas-, pensar en grande y consolidar la figura del líder como pieza clave en el cambio cultural, para contagiar su visión responsable al resto de la organización y lograr empresas más exitosas, de mayor excelencia.
Otro reflejo de esta convicción son los premios SERES, así como todas las candidaturas que hemos recibido. Desde aquí os invito a la próxima convocatoria 2016.
Si nos detenemos a analizar las grandes cifras de este 2015, vale la pena desgranar parte de los interesantes resultados del II Informe del Impacto Social de las Empresas, elaborado junto con Deloitte, a quien agradezco su colaboración y aportación desde aquí. Algunas de las conclusiones que arroja este informe en el que han participado 68 empresas, 57% de las empresas SERES y una representación del 20% del PIB español, con 938.600 empleados.
Estas empresas han impactado en las personas. Sus actuaciones sociales han llegado a casi 12 millones de beneficiarios, con especial hincapié en colectivos como infancia y juventud y discapacidad y enfocadas en muchos casos a empleo y bienestar. En esta línea, cabe destacar que más de 38.000 personas desfavorecidas han sido integradas laboralmente durante 2014. Las empresas participantes en el estudio realizaron en total más de 5.500 proyectos de actuación social. Destacan la inversión media para proyectos acometidos en el ámbito del empleo y la integración laboral con una inversión media de 222.600 euros por proyecto.
Y como no, estas actuaciones han ido acompañadas de inversión. 438 millones invertidos y un 57% de la inversión se ha dedicado a España. Pero no solo de inversión. También han sido capaces de movilizar a sus empleados y a otros agentes.110.000 empleados involucrados en actividades sociales (15,5%) de la plantilla y un 77% de las empresas promueven voluntariado corporativo. Estas empresas han puesto en marcha 5.300 colaboraciones con entidades sociales.
Adelante, ya sabemos cómo hacerlo. Sabemos que funciona y que crea valor. Podemos ser los líderes que marquen la diferencia, que dejen huella con su impacto. Nuestra tarea es hacer crecer esta realidad, fortalecerla y permitirla avanzar.